No es para nada sorprendente que su CEO, Thierry Breton, antiguo ministro de finanzas de Francia, tome esta desición si observamos los tiempos medios dedicados a responder correo a nivel global, que oscilan entre 2 y 4 horas diarias. Es decir:
Casi un 50% de la jornada laboral, los empleados están usando para comunicarse una herramienta que surgió hace más de 30 años, el email.
Esto podríamos verlo como una buena noticia si el abandono del correo electrónico, herramienta completamente imbricada en nuestros hábitos diarios, fuera una tarea sencilla, pero no lo es. En una encuesta realizada en por el periódico «The Telegraph» en referencia a la noticia donde se pregunta por el futuro del correo electrónico los internautas arrojan las impresiones de la gráfica adjunta:
el 42% de los encuestados, no creen que el correo va a desaparecer
La evolución del correo electrónico a las herramientas 2.0 supone numerosas ventajas, pero cabe destacar dos de ellas:
- Un aumento de la productividad de la comunicación interna a la empresa en comparación con el email.
- Conseguimos que automáticamente, el conocimiento empresarial (documentos, discusiones, coordinación, etc.) no se pierda en las bandejas de correo de nuestros empleados.
Para terminar, podríamos decir que:
Siempre existirán conversaciones empresariales privadas (email, mensajería, social email), pero estas deben ser compaginadas con conversaciones 2.0 que aumenten el conocimiento del negocio capturado por las empresas